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La importancia de cuidar tu huella digital

Por qué es importante cuidar TODO lo que publicamos en las redes sociales:

Cada día que pasa compartimos de manera natural en las redes sociales todo o casi todo sobre nuestra vida diaria, muchas veces no pensamos en cómo esto puede repercutir en nuestro futuro personal o profesional y cuál es nuestra huella digital.  Si bien es cierto la sinceridad es una cualidad que todos valoramos pero, ¿Es necesaria en nuestros perfiles personales?

Porqué cuidar tu huella digital

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Todo lo que sube a la web se queda ahí para SIEMPRE:

No importa si en este momento de tu vida sientes que estas en tu mejor etapa profesional y crees que nunca vas a tener la necesidad de moverte y encajar en otra empresa, otra cultura institucional o quien quita, montar tu propia empresa, todo puede pasar.  Cada día es más común que las empresas en sus procesos de reclutamientos se tomen el tiempo de buscarte en redes sociales. Así pueden hacerse una idea sobre tu personalidad, gustos y conocer más de las personas que te rodeas en tu vida cotidiana.

Pensar bien que queremos proyectar y que no:

Es cierto que la  “Internet society” te da la posibilidad de ser “LIBRE”, opinar lo que quieras, hablar sobre lo que quieras, incluso si tuviste una mala experiencia con alguna marca o servicio desahogarte públicamente y exponer al mundo el error que cometieron contigo. Pero no olvides que eso queda ahí para siempre y si te expresaste mal o utilizaste palabras no muy adecuadas con las que otras personas se puedan sentir ofendidas, eso te puede causar problemas en un futuro.  Así estarás componiendo una huella digital que estas formando sobre ti mismo equivocada. Antes de opinar sobre religión o política públicamente, piensa si eso no puede afectar a largo plazo tu futuro profesional. Si lo haces asegúrate de no ofender a nadie ni mucho menos parecer un extremista con tu opinión. Así como tu tienes libertad de expresarte, los demás también.

Tampoco olvides que las fotos que compartes hablan mucho de ti. Tu vestuario, tus gestos, lo que te rodea y proyectas podrá servir a tu favor o en tu contra sobre lo que perciben los demás. En este orden de cosas cuida tus comunicaciones y revisa los sistemas que utilices, no des información de más, no aportes datos que pongan en entredicho tu seguridad en internet. Ten cuidado también con las comunicaciones que recibes, pues existen muchos fraudes en internet, como phishing, suplantación de identidad digital o robo de cuentas de redes sociales.

Cuidar tu redacción y ortografía:

Como bien dicen “nunca sabes de quien vas a necesitar”, posiblemente en este momento de tu vida estés buscando una oportunidad laboral o estés pensando cambiarte de trabajo. En estos casos ten cuidado porque esa empresa en la que tanto anhelas estar te puede cerrar las puertas después de investigar tus redes sociales y analizar tu huella digital.  Aunque creas que todo está “privado”, siempre hay alguien que te observa. Hay personas que  tienen la posibilidad y el tiempo de buscar tus fotos y comentarios de hace 10 años.

Cuidar tu imagen personal:

Está claro que no vas a andar siempre con tus mejores outfits  o arreglado para te miren los demás. No se trata de seguir el postureo que tanto les gusta a los bloggers, pero tampoco es necesario que subas literalmente toda tu vida personal a redes sociales, guárdate esos momentos únicos para ti y los tuyos.

Si bien es cierto que  cada vez es más popular entre bloggers y famosos compartir fotos “al natural”, tú no tienes por qué unirte a ese tipo de “modas”. Seguramente no te harán ganar nada (a menos que te quieras dedicar a eso o tu perfil profesional se preste para ello). Y como bien dicen, los extremos nunca son buenos, toma también en cuenta que un exceso en la edición de tus fotos puede dejar a la luz tus inseguridades físicas (que nadie tiene porque saberlas). Por otra parte, toma en cuenta que un descuido en tu imagen puede ser mal interpretado.

No publiques cada lugar que visitas:

Por último, piensa que publicar tu ubicación en cada fotografía o incluso subir en tu estado de Facebook o en las historias de Instagram cuando andas de fiesta cada fin de semana te puede jugar una mala partida. Cuida las publicaciones que puedan proyectar algo que no quieres o que pueda afectar a tu imagen profesional o personal. Por supuesto que todos tenemos derecho a divertirnos, pero no es necesario que el mundo entero sepa todo lo que haces.

Otras formas de generar huella digital

Seguro que conoces el remarketing. Sí, ese seguimiento que hacen marcas, empresas y agencias de tu navegación en Internet. También es una manera de ir dejando tu huella digital como consumidor. Tras la última ley de cookies, cuando utilizas un servicio, al entrar en la web debes aceptar el uso que haces de ellas. Si no quieres que te hagan ese seguimiento, lee con atención la política de cookies de cada empresa y escoge cuales te interesa aceptar.

Ten cuidado también con los servicios de notificaciones y con las suscripciones a servicios, pues pueden generar una gran cantidad de spam en tu cuenta de correo. A través de ellas corres riesgos de activar servicios que no quieres y de aportar información y datos personales a empresas que los pueden almacenar en una base de datos y comerciar con ellos.

Ahora ya lo sabes, haz que tu huella digital este a tu favor, busca información relacionada para optimizar tus redes sociales o fórmate en gestión de redes, y sobre todo cuida tu imagen porque alguien te puede estar observando.

Foto portada by Artem Beliaikinfrom Pexels

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