Existe hoy en día una creciente preocupación por el abuso que se hace del uso de Internet y sus numerosas utilidades, hasta el punto de convertirse en un verdadero problema de salud pública (principalmente entre la población más joven), comparable al abuso de drogas tradicionales.
Antes de comenzar me gustaría presentaros el siguiente vídeo en el que se hace un interesante análisis, con ejemplos prácticos reales, sobre este problema de abuso o adicción a Internet:
A pesar de la creencia de que existe un problema generalizado de adicción a Internet, muchos expertos afirman que no existe en sí mismo una verdadera adicción, sino más bien un uso abusivo de las mismas.
Para tomar una verdadera conciencia sobre este problema de índole sanitaria, quiero hacer referencia a un reciente estudio publicado en el portal científico PLoS One sobre el impacto psicológico de la exposición a Internet.
Este estudio determina que tanto los adictos a Internet como los drogadictos experimentan síntomas muy parecidos en el proceso de desintoxicación, y que una adicción a Internet desencadena síntomas muy similares al síndrome de abstinencia por el que pasan los drogadictos tradicionales. Los sujetos objeto del estudio que mayor uso hacían de Internet, sufrían grandes bajones de ánimo después de desconectarse. Cuando estos usuarios se desconectan, su humor se vuelve cada vez más negativo, al igual que ocurre con las personas que se quitan de drogas ilegales como se produce, por ejemplo, en el caso de consumo de éxtasis”. Los resultados del estudio demuestran que las personas que más consumen Internet tienden a ser más depresivos y muestran un nivel más alto de autismo.
Es evidente que el gran impacto que han adquirido las redes sociales, han hecho que este problema se vea agravado en los últimos años, ya que lo que hace menos de una década se veía como un problema exclusivo de adolescentes “enganchados” a juegos online del tipo “World of Warcraft”, se haya generalizado a un número de personas exponencialmente mayor.
Quizás todos tengamos la imagen de una adicción a Internet, como la que mostraba el famoso “Niño alemán loco” que jugaba al Counter Strike y que se convirtió en uno de los vídeos más conocidos de la red la pasada década:
Sin duda se trata de un vídeo impactante, aunque ha sido tratado como un ejemplo de humor viral, quizás de forma errónea, al no vernos venir este grave problema.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) cataloga la ciberadicción (IAD) como ‘adicciones sin sustancia’ a la par de otras como la ludopatía o las compras compulsivas, no obstante la Asociación Americana de Psicología y la Asociación Americana de Psiquiatría (dos de los principales y más respetados estamentos dedicados al estudio de este tipo de patologías), no la aceptaban, en sus inicios, como adicción, pero 20 años más tarde, han revisado sus criterios y evaluaciones hasta incluirlas como tales, en su nueva edición de la ‘Biblia de la Psiquiatría’.
La reciente noticia en la que se acusaba a una pareja de padres en EEUU de tener encerradas y completamente desatendidas a sus 2 hijas durante años, por estar prácticamente la totalidad del día jugando al famoso juego online “World of Warcraft”, sigue impactándonos y escandalizándonos, pero se trata de un caso completamente real, este caso quizás pueda hacernos reflexionar sobre que estas tendencias ya no afectan exclusivamente a la población más joven, sino a todo tipo de personas. NOTICIA ABANDONO HIJAS POR JUGAR AL WOW
Según los estudios, el 13,5 por ciento de los adolescentes entre 12 y 24 años, hacen un uso abusivo de la tecnología, incluidos como tal el móvil, chat, internet o videoconsolas.
En Internet se pueden encontrar diferentes escalas de valoración, por ejemplo, en en www.adictosainternet.com, que pueden servir de guía para saber si estamos teniendo un uso abusivo de Internet o de las redes sociales.
Un buen número de psicólogos se han especializado en los últimos años en este tipo de conductas adictivas, explicando las características (comunes a todos los trastornos mentales), como son:
- Malestar o sufrimiento subjetivo.
- Pérdida de libertad/autonomía.
- Falta parcial/total de adaptación al entorno y la sociedad.
- Violación de normas sociales o morales.
- Incomprensibilidad de la conducta y sufrimiento de los que están alrededor (carencia de empatía).
Además de estos, los ciberadictos sufren trastornos más básicos o comunes, como son el abandono de la actividad física, desinterés en todo lo que esté fuera del uso de la tecnología y también la pérdida de la fuerza de la voluntad; además de descuidar su propia salud y sufrir trastornos del sueño y otros ritmos básicos como la alimentación o la higiene.
Si consideras que tanto tú como cualquiera de tus conocidos puede estar sufriendo de esta adicción a Internet, os dejo una serie de consejos para saber cómo actuar de forma adecuada:
- Buscar asesoramiento profesional.
- No dramatizar: este tipo de trastornos se pueden resolver.
- Adoptar una postura firme pero dialogante con el adicto.
- Acordar una línea común de actuación con el adicto, a fin de evitar chantajes emocionales.
- No decir nada que no se esté dispuesto a hacer.
- Intentar que los problemas del adicto no lleguen a preocuparnos más que al él mismo, no es nada adecuado dejar que su obsesión acabe siendo en la nuestra.
Así que tras leer este artículo sólo os recomiendo una cosa, comentadlo y a continuación apagad el ordenador y salid a dar un paseo, ya que vuestra salud mental puede estar en juego.
Muchas gracias por tu análisis del artículo Guillermo y por el enlace, al cual ya le he echado un vistazo.
Sin duda es preocupante la dependencia que, principalmente los más jóvenes de la casa, están teniendo de Internet y las nuevas tecnologías en general. Debemos tener especial cuidado en educarles para que puedan desarrollar un uso adecuado de las mismas, antes de que pueda convertirse en un verdadero problema de salud mental en ellos.
Gracias por tu aportación.
En nada clínicas de desintoxicación de Internet
No se si llegaremos a tal extremo Mónica, pero no es descartable en ningún caso.
Gracias por tu aportación.
Toxinternet, la enfermedad del siglo XXI
Futuro para las empresas farmacéuticas 3.0
Muy bueno
El futuro se escribe día a día Pedro. En nuestras manos está el cambiarlo o no.
Gracias por tu aportación.
Con respecto a los menores o adolescentes, la culpa la tenemos los padres. Hay q tener un control y un horario de uso de Internet o de los móviles con acceso a ello igualmente…eso es lo que nos tiene que quedar muy claro.
Muy buen post.
Hola Marisa.
No creo que el término control sea el más adecuado para éste, ni ningún otro caso similar, sino que todo parte de un nivel adecuado de educación y enseñanza previa con dichos adolescentes. Algo que puede resultar cuanto menos utópico, pero que, bajo mi punto de vista, sería la situación ideal.
Gracias por tu aportación.